Definición de Diseño Instruccional
Aunque existen muchas definiciones de diseño instruccional, de manera general podemos decir que comprende una serie de acciones enfocadas a comprender y mejorar el proceso de instrucción. Se le atribuye a Robert Glaser haber acuñado el término “diseño instruccional” en 1962. A partir de entonces han surgido diversas definiciones, incluso desde diferentes enfoques.
Leer +
Reigeluth (1983), por ejemplo, describe el diseño instruccional desde dos perspectivas: en primer lugar, como actividad profesional dedicada a definir cuál es el mejor método de instrucción para lograr los cambios deseados en los aprendices, tanto en conocimientos como en habilidades, y tomando en cuenta para ello las características particulares de la población estudiantil en cuestión, así como los contenidos que se busca sean aprendidos. El resultado final de esta actividad es plan instruccional, en el que se detallan todos los rubros mencionados.
Por otra parte, el diseño instruccional visto como disciplina se relaciona con la comprensión del proceso de instrucción con el fin generar conocimientos sobre cómo mejorarlo aplicando los métodos óptimos para lograr los fines deseados.
Por su parte, Berger y Kam (1996) en su recopilación de definiciones incluyen también aquella que concibe al diseño instruccional como proceso (desarrollo sistemático de especificaciones instruccionales para asegurar la calidad de la instrucción, con base en las teorías del aprendizaje y la instrucción), además de verlo como ciencia y como realidad.
Modelos y Teorías de Diseño Instruccional.
Es importante distinguir entre teorías y modelos de diseño instruccional para facilitar su manejo y aplicación en situaciones particulares.
De manera general, Dorin, Demmin y Gabel (1990, citados en Mergel, 1998) conceptualizan una teoría como el conjunto de saberes que puede explicar de manera general observaciones realizadas por científicos o comportamientos, siendo capaz también de predecirlos. Debe validarse por medio de pruebas de distinta índole y es susceptible de modificaciones e, incluso, de ser desechada. El modelo, en cambio, es una figura mental creada para lograr entender aquello que no puede verse directamente. El modelo nos ayuda a visualizarlo y explicarlo.
Ya en el ámbito específico del diseño instruccional, para Reigeluth (1983) una teoría instruccional consiste en los principios fundamentales a partir de los cuales se pueden explicar y predecir los fenómenos de instrucción. Estas teorías pueden ser prescriptivas, estableciendo las condiciones y resultados que se esperan y definiendo los mejores métodos para lograrlo, o descriptivas, en las que se proponen los posibles resultados que pueden obtenerse a partir de condiciones y métodos dados.
En relación con los modelos instruccionales, estos son conjuntos integrados de componentes de estrategia, en donde se explicita la manera particular de secuenciar los contenidos para cada situación dada, y que han ido evolucionando a la par de las teorías del aprendizaje.
En los últimos 50 años se ha desarrollado un gran número de modelos de diseño instruccional y, aunque todos ellos tienen una esencia común, también poseen características particulares que los distinguen de los demás.
Y aunque es importante recalcar que el diseño instruccional debe estar respaldado por teorías de la instrucción (lo que debe hacer el profesor/instructor) más que por las del aprendizaje (lo que sucede con el estudiante/aprendiz), la relación entre ellas no puede pasarse por alto, y hay una influencia importante de las segundas en estos modelos. Para identificar esta relación.
Principales Teorías del Aprendizaje
Ce puede resumir como la modificación de la conducta en respuesta a un condicionamiento que se da como consecuencia de estímulos repetitivos (recompensas y castigos). En esta modificación de la conducta el papel de la mente es prácticamente irrelevante y hay quienes la representan como una “caja negra” que recibe los estímulos y produce respuestas, sin importar lo que suceda dentro de ella para lograrlo.u003cbru003eEvidentemente esta teoría aplicada a la educación se refleja en el uso de reforzadores positivos y negativos para lograr el aprendizaje que, a final de cuentas, es una modificación de la conducta.
La mente se convierte en la protagonista principal, pues esta corriente psicológica se encarga de estudiar la manera en que esta recibe, interpreta, procesa y almacena la información y cómo todo ello influye en la forma en que las personas se desenvuelven. Aunque, al igual que el conductismo, el cognitivismo propone que el aprendizaje se da por medio de la experiencia, se enfoca en comprender cómo es que esto sucede y cuáles son los procesos mentales que lo regulan. En este enfoque la memoria toma un rol sobresaliente, pues es gracias a ella que se da el aprendizaje.
Propone una visión diferente del aprendizaje, pues este ya no se basa en una única realidad externa al aprendiz, sino en la construcción de significados que este hace internamente al restructurar sus conocimientos previos para incorporar los nuevos. En este enfoque el aprendiz toma el papel protagónico y el instructor pasa a ser un guía encargado de facilitar el proceso de aprendizaje.
Teoría surgida apenas en 2004 se basa en el hecho u003ccodeu003ede que, dado que actualmente el conocimiento se encuentra distribuido enu003c/codeu003e grandes redes de conexiones, en esta era digital el aprendizaje implica necesariamente la habilidad de hacer crecer, pulir y atravesar tales redes con el fin de crear significados a partir de las conexiones identificadas.
Cada una de estas teorías del aprendizaje tiene sus propias implicaciones en el diseño de la instrucción, y es importante distinguirlas para poder elegir la mejor en cada caso particular.
Por otra parte, como ya se mencionó, a lo largo de los años han surgido diversos modelos de diseño instruccional, de acuerdo con Yukavetsky (2003) y Muñoz (2011), estos son:
- Modelo de Dick y Carey
- Modelo de prototipo rápido
- Modelo de cuatro componentes (4C/ID)
- Modelo de Jerrold Kemp
- Modelo ASSURE
